Las ciudades tienen dos almas. Una visible, ordenada y orgullosa, hecha de monumentos, plazas y calles con nombre propio. Y otra, más honda, enterrada bajo sus aceras, oculta entre las grietas…
Leer másLas ciudades tienen dos almas. Una visible, ordenada y orgullosa, hecha de monumentos, plazas y calles con nombre propio. Y otra, más honda, enterrada bajo sus aceras, oculta entre las grietas…
Leer más